Amados (as) hermanos (as):

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Amados hermanos en Cristo:

Solamente faltan dos días para que termine el 2017 y los mejores deseos para el nuevo año es que sigamos contando con las bondades de nuestro Dios, porque su fidelidad es grande.

Lo invito a despojarse de todo aquello que le pueda causar melancolía, pues el ambiente es propicio para ello y para sacudirse esas tendencias, recuerde que somos peregrinos y extranjeros en esta tierra (1ª. Pedro 2:11). Por si acaso escucha: “Faltan 5 pa’ las doce o Yo no olvido el Año Viejo”, siéntase dichoso que no lo harán llorar. (cómo antes). Yo tuve ese problema de melancolía y lloraba cuando escuchaba dichas canciones… hasta que fui liberada por Cristo a través de Su Palabra. Cuando estamos fuera de Dios, no nos percatamos que hacemos lo que nuestra Alma quiere, pues ésta se presta a toda clase de sentimientos y muchos de ellos nos atrapan para provocar tristeza.

Hay caos en el mundo, la mayor parte de los seres humanos ha perdido la sensibilidad para todo, no temen a Dios y en lugar de mejorar, esto tiende a empeorar. Para nosotros no es una novedad, porque Dios lo dice en su Palabra que esto tiene que suceder.. (Mateo cap. 24).

No sigamos perdiendo el tiempo “contemplando” lo que pasa a nuestro alrededor y mejor tomemos medidas de emergencia porque el tiempo se nos acaba para lograr la meta que nos corresponde: Estar preparados para el EVENTO que está a las puertas: el Rapto de la desposada.

Desde ahora, dejemos que nazca en nosotros una nueva actitud y es apreciar la identidad especial que adquirimos desde que nuestro Señor Jesucristo vino a ser nuestro Señor y Salvador. Esa identidad se acciona en cada creyente y nos constituimos en la Iglesia del Señor y también conformamos el Cuerpo de Cristo. (Hechos 20:28) y (Col. 1:24) Por supuesto que somos la Iglesia de Cristo, pero no nos quedemos hasta allí, Dios está esperando que nos veamos como la Iglesia desposada.

Como iglesia del Señor estamos dando testimonio de ello, pero como Iglesia Desposada, aún no damos la talla, nos faltan las características del papel de una desposada. Esta exhortación ha llegado a mi vida y deseo compartirla con ustedes para que aprovechemos bien nuestro tiempo y no nos vayamos a quedar como dicen, silbando en la loma.

Una de las características que se le debe notar a la Iglesia Desposada es que cada corazón debería estar latiendo pensando cómo serán las Moradas Celestiales, esperando el regreso de nuestro Señor Jesucristo, pero no de la manera que lo hacemos, se nos nota!! Nuestro gozo debe ser autentico, porque si nos pasamos el termómetro espiritual, comprobaremos que estamos fríos. Llegamos al colmo de pensar si asistir o no a la Iglesia, porque hemos mezclado los términos humanos con los términos Divinos y para asistir al “culto” como decimos, “pensamos hacerlo” por si acaso nos queda tiempo, porque tendremos una visita especial, porque hace mucho frió, porque los buses… porque esto, porque aquello. Cree usted que Dios acepta tales argumentos? Noooo, no es cosa de desear asistir o no… es que HEMOS SIDO CONVOCADOS por el mismo Dios. Y nosotros haciéndonos los importantes!! Esto es muy serio y delicado hermanos, si usted lo llega a visualizar detenidamente.

Ah, hermanos (as) todo lo arriba expuesto debería sacudirnos, hasta el grado de quitarnos el sueño. Primero para velar y orar porque los días son malos y es tiempo de preparación… y segundo para darnos cuenta que no estamos haciendo bien las cosas como Dios demanda.

Estas piedras me las tiraron a mí y he aguantado el sopapo, porque me han hecho recapacitar para mi bien y las estoy lanzando y si le caen, espero que no le duela mucho, porque son tiradas en el amor del Señor..

Despertemos hermanos (as)! Lo que ha acontecido en nuestras vidas es hermoso, indescriptible, es un milagro, pues estábamos destituidos de la gracia de Dios, por nuestros delitos y pecados y fuimos redimidos por nuestro Señor Jesucristo, que pagó por nuestros pecados, sufriendo la muerte.

Que el nuevo año, nazca juntamente con el nuevo nacimiento de una nueva actitud, la cual provocara nuevas oportunidades para alcanzar lo que debe ser alcanzado: ser la desposada. En Dios son nuevas todas las cosas.

Que la paz de Dios more en cada vida. Amén.